Hoy celebramos el Black Friday, un día en el que muchos consumidores salen a las tiendas o colapsan internet para comprar productos rebajados y realizar sus pagos de forma segura. Lo que muchas personas no saben es que, en sus inicios, la historia del Black Friday no tenía nada que ver con esto.
El bulo más común sostiene que el nombre del Viernes Negro viene de la esclavitud en Estados Unidos. Supuestamente, el viernes después de Acción de Gracias era el día elegido para vender a los esclavos de color a un precio más barato para la temporada de invierno.
Nada más lejos de la realidad. La historia del Black Friday se remonta al siglo XIX, en plena expansión económica norteamericana. Vamos a deconstruir esta época para entender por qué estamos celebrando este día en España, un siglo y medio después de su nacimiento.
La historia del Black Friday: el escándalo financiero de 1869
Las crisis económicas son recordadas con nombres muy impactantes. La crisis de los tulipanes del siglo XVII, el crack de 1927, el Lunes negro de 1987… La que sucedió el viernes 24 de septiembre de 1869 fue tan grande, que terminó dando nombre a lo que conocemos como Black Friday.
Ese día, Jay Gouldn y Jim Fisk, dos agentes financieros de primer nivel de Wall Street, vieron cómo sus ambiciosos planes se venían a pique. Unos meses antes habían acordado con un famoso político de Nueva York, Boss Tweed, la compra de jueces para conocer de antemano la venta de oro por parte del gobierno de Estados Unidos.
La maniobra salió mal para el presidente y el vicepresidente de los ferrocarriles Erie Railroad. Cuando se descubrió la trampa, muchos inversores corrieron a retirar su dinero de la Bolsa, lo que produjo una caída en masa del valor de las acciones y una crisis económica impresionante.
El resultado fue un Escándalo de Oro (‘Gold Scandal’), que dejó una mancha negra en el historial impecable de Wall Street. Curiosamente, la crisis no afectó a Gouldn ni a Fisk, que sería asesinado tres años después en el Grand Central Hotel.
La historia del Black Friday: el Día de Acción de Gracias
Un siglo después, en 1966, las palabras Black Friday volvieron a asociarse a un hecho “negro”, pero de mucha menor repercusión: el colapso circulatorio de Filadelfia. En este caso, fueron las carreteras de este Estado las que se llenaron de nubes oscuras por el humo acumulado de los tubos de escape en los atascos.
El término se hizo famoso por todo Estados Unidos a partir de 1975, gracias al repunte de ventas que vivían los negocios como preparación a la época de Navidad. En aquellos días, los comercios conseguían convertir los números rojos en números negros, a través de sus descuentos y ofertas de última hora.
La historia del Black Friday ha experimentado pocos cambios desde entonces. Su fama ha llegado a todo el mundo, a través de una estrategia de marketing muy astuta de los mercados americanos, y se ha convertido en un evento que a veces se alarga a una semana, con otros días de oferta como el Small Business del sábado o el Cyber Monday.
Trucos para ahorrar de cara al Black Friday
Este viernes tenemos una cita con los comercios, en formato físico y digital. Es importante que, antes de comprar, prepares una lista de deseos comparando los precios de varios productos y asegurándote de que las tiendas online que visitas son completamente seguras.
Utilizar una tarjeta virtual puede serte de gran ayuda para ahorrar en tus compras durante el Black Friday, porque te permite cargar solo la cantidad que necesitas para tus pagos. Además, es interesante que conozcas los gastos de envío y la política de devolución de cada comercio para evitar sobresaltos en el último momento.
Una de las mejores ideas para cultivar tu capacidad de ahorro antes de finalizar el año es comprar los regalos de la época navideña de antemano. Aprovecha esta fecha del Black Friday para hacerte con ese ordenador o esa televisión que tanto le gusta a tus seres queridos, con una rebaja sustancial y con la garantía de poder devolverlo antes de que lleguen Papá Noel o los Reyes Magos.