El pasado miércoles, el Gobierno, los agentes sociales y las patronales CEOE y Cepyme han logrado un acuerdo de última hora para prorrogar los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) hasta el 31 de enero de 2021.
Actualmente hay cerca de 750.000 trabajadores acogidos a este mecanismo socioeconómico, que hasta ahora ha englobado a aquellas empresas que presentaban pérdidas de actividad como consecuencia del COVID-19 y del estado de alarma.
Estos trabajadores han seguido cobrando su prestación por desempleo equivalente al 70% de su cotización en base a los 180 últimos días cotizados. Sin embargo, la necesidad de cerrar un nuevo acuerdo por la extinción de los ERTE el 30 de septiembre ha llevado al Ministerio de Trabajo y a las patronales a llevar a cabo una serie de cambios que afectan a sectores como la hostelería o el comercio.
¿Cómo será el nuevo ERTE prorrogado hasta el 31 de enero?
En líneas generales, se trata de nuevos ERTE que prorrogan las funciones de aquellos que fueron aprobados en marzo, pero incluyen nuevos colectivos y actividades que han resultado más dañados como consecuencia del coronavirus. Estas son las características que definen cómo serán los nuevos ERTE a partir de ahora:
- En primer lugar, se establecen tres tipos de ERTE en función de la situación que atraviesa la empresa: el ERTE de suspensión, que afecta a aquellas que hayan cerrado por decisión del Gobierno; el ERTE por limitación de actividad y el ERTE para los sectores más afectados. En este último caso, se sigue una lista de 42 actividades económicas que han tenido que cerrar con especial gravedad y a las que se atenderá con prioridad.
- El requisito para aquellas empresas que quieran acogerse a las ayudas y no entren en los puntos anteriores será que el 50% o más de su facturación dependa de una firma en ERTE por sectores.
- Las ayudas dependerán del tamaño de la empresa y del sector en el que se encuentren. Comenzarán con un 100% para los ERTE de suspensión y limitación de actividad, que irán decayendo un 10% mes a mes hasta enero. Los sectores más afectados contarán con un 85% hasta el primer mes de 2021 si tienen 50 empleados o menos, y un 75% si sucede lo contrario.
- El Estado seguirá garantizando a los trabajadores el 70% de su salario base, que debería terminar por ley a los seis meses desde el último período cotizado. Además, les asegura que se les devolverá el tiempo de paro consumido hasta seis meses y medio si son despedidos en este año o durante 2021.
- Los trabajadores fijos discontinuos cuentan con una nueva cláusula que les permite obtener una prestación extraordinaria compatible con el trabajo por cuenta ajena a tiempo parcial si ya se han encontrado en un ERTE en algún momento de la pandemia.
Uno de los grandes alivios para los empleados está en la cláusula que evita el despido mientras se encuentran en un ERTE. Aquellas empresas que a partir de ahora entren en este expediente tienen que respetar los seis meses de actividad del trabajador, y si no lo hicieran tendrían que retonar el importe correspondiente a la exoneración de cuotas a la Seguridad Social y de los importes de las prestaciones de este.
Una de las iniciativas que pusieron en marcha las entidades del Grupo Caja Rural en el mes de abril consistió en el pago adelantado de estas mismas prestaciones a sus clientes a través de ruralvía, su servicio de banca digital. Además, también han sido facilitadores de financiación a empresas, de cualquier tamaño, autónomos y emprendedores, a través de las Líneas ICO, por ejemplo. TAmbién se ha puesto en marcha un proyecto para hacer más sencillo y accesible la búsqueda de ayudas y subvenciones públicas.
Junto a ellas, muchas otras empresas han decidido dar un paso adelante y colaborar para paliar los devastadores efectos de la pandemia entre los españoles. Entre todos, podemos aportar nuestro granito de arena para que la situación mejore en el futuro.
