Es posible que este verano hayas cambiado tus planes vacacionales y en vez de irte fuera, estés o vayas a disfrutar de una casa rural en familia. Es una opción que nos permite cumplir las recomendaciones sanitarias respecto a la distancia social y además, reducir gastos. Cuando somos muchos lo mejor es planificar el menú con anterioridad y que cada uno se encargue de elaborar un plato. Hoy te proponemos 10 recetas de comida fría para que sorprendas a tus familiares.
En verano no apetece entretenerse mucho en la cocina y menos cuando estamos de vacaciones. Para disfrutarlas al máximo lo ideal es preparar recetas rápidas y frías, que podamos dejar hechas e irnos tranquilamente a la playa, a la montaña, a la piscina… sabiendo que, cuando volvamos, tenemos la comida o la cena lista. Las recetas que te dejamos a continuación cumplen estas premisas, por lo que toma nota y coge ideas.
10 recetas de comida fría
¡Ve a por el delantal, que empezamos!
- Ajoblanco es una sopa fría muy popular de la gastronomía extremeña y de otras provincias andaluzas. Se considera el padre de todos los gazpachos y se prepara a base de miga pan, ajo, aceite de oliva virgen extra, vinagre, sal, agua y almendras. Puede prepararse tanto con un procesador de alimentos como sin él. Para ello, hay que poner a remojo la miga de pan y ponerla en el vaso de la batidora, junto con el agua, las almendras crudas, el diente de ajo, vinagre y sal y triturar. Con la batidora en marcha, vamos echando el aceite poco a poco, como si hiciéramos mayonesa, para que emulsione bien. Sírvelo bien frío y ¡a disfrutar!
- Crema fría de zanahoria y mango. Una alternativa perfecta al tradicional gazpacho y con una combinación de sabores súper original. Para prepararla, necesitarás media ramita de apio, ½ mango, ½ kilo de zanahorias, agua, sal, jengibre y un chorrito de nata líquida. Empieza lavando el apio y quitándole las hebras. Pela y pica las zanahorias y ponlas, junto con el apio, a hervir con agua y sal durante unos 15 minutos. Cuando esté cocido, incorpora el mango cortado en trocitos pequeños y bátelo todo. Añade un poco de jengibre rallado y tritúralo hasta conseguir la textura deseada. Añade la nata líquida para darle un toque de cremosidad. Si prefieres restar calorías al plato, puedes prescindir de la nata o utilizar leche desnatada o cualquier bebida vegetal.
- Trampó mallorquín. Esta receta típica de Mallorca es uno de los platos estrella del verano, tanto si estás en la isla como si no. Es una receta fresca y saludable elaborada a base de tomate, pimiento y cebolla. La clave del éxito está en combinar bien las cantidades de los ingredientes. Debe llevar mucho tomate, poco pimiento y menos cebolla. Es tan sencillo como picar todos los ingredientes y añadirlos por el siguiente orden: tomate, pimiento y cebolla. Aliña con sal y aceite de oliva virgen extra y listo. Fácil, ¿verdad? Pues además, con el trampó puedes hacer todo tipo de recetas, como por ejemplo coca u hojaldre de trampó.
- Ensalada caprese. Esta ensalada típica italiana, en concreto, de la isla de Capri, es tan sencilla como combinar tomate, mozzarella fresca y hojas de albahaca fresca. Para que esté realmente rica lo importante es elegir productos de gran calidad y un buen aceite de oliva virgen extra para el aliño. Si lo deseas, puedes añadir un puñado de aceitunas negras y espolvorear un poco de orégano por encima. Al ser una de las ensaladas más famosas del mundo las variantes son infinitas.
- Corona de arroz con verduras y jamón. Esta receta es un plato muy vistoso que encantará a los peques. Consiste en hacer un arroz hervido -lo mejor es que uilices un arroz largo- y a la hora de emplatarlo, utilizar un molde de corona, rellenarlo con el arroz y en el centro poner un salteado de verduras. Al ser un plato frío, te aconsejamos que lo acompañes con mayonesa, salsa rosa o una salsa de yogur y os chuparéis los dedos.
- Lasaña de verano con atún, tomates secos y maíz. Éste es otro de esos platos que no pueden faltar en verano porque además de fresco, está riquísimo. Nosotros te proponemos un relleno a base de lechuga, cebolla, tomates secos, surimi, maíz y atún, pero puedes añadir o quitar tantos ingredientes como quieras. Todo lo que tienes que hacer es preparar las placas de lasaña siguiendo las indicaciones del fabricante y preparar todos los ingredientes. Cuando los tengas, mézclalos en un bol con mostaza y mayonesa y monta la lasaña. Termina con una placa de lasaña, cubre con mayonesa y decora con huevo cocido.
- Barquitas o tacos de gambas y mango. Si os gusta la comida mexicana, los tacos serán uno de vuestros platos preferidos. Estos tacos de gambas y mango puedes servirlos tanto con la tortilla de maíz como en plato y disfrutar de una ensalada deliciosa. Necesitarás tortillas de maíz, tomates, aguacates, mango, cebolla, lima, aceite de oliva virgen extra y cilantro. Corta en trocitos pequeños el tomate, la cebolla y el mango. Incorpora los ingredientes en un bol junto con los gambas cocidas, peladas y troceadas. Aliña con aceite de oliva virgen extra, zumo de lima, sal y cilantro. Calienta las tortillas de maíz y monta los tacos.
- Brazo de gitano salado con pan de molde. Las opciones de relleno son muchas. Elige los ingredientes que más te gusten, como tomate, lechuga, huevos, atún, pimientos del piquillo, jamón de york… Y para hacerlo, extiende una lámina de film transparente y coloca encima las rebanadas de pan de molde una al lado de otra, superponiéndolas un poco. Pasa un rodillo por encima y aprieta bien. Pinta con un poco de mayonesa y coloca todos los ingredientes pelados y cortados sobre la base y con mucho cuidado, enrróllalo ayudándote del papel film. Déjalo reposar en la nevera y decora con mayonesa, rodajas de huevo cocido y unas tiras de pimiento del piquillo.
- Milhojas de piña fresca y crema pastelera. Son un postre sencillísimo, fresco y ligero perfecto para comidas o cenas copiosas. Necesitas piña fresca pelada sin el tronco del centro y crema. La crema puedes hacerla tú mismo o comprarla ya hecha para no complicarte. Hacer las milhojas es tan fácil como poner una rodaja de piña, cubrir con la crema pastelera, colocar encima otra rodaja de piña sobre la crema y cubrir con más crema. Decora con unos pistachos por encima.
- Crema de limón y leche de coco. Éste es otro postre fácil y rápido de hacer que dejará a tus comensales con la boca abierta. Para prepararlo, necesitas 1 lata de leche de coco, zumo de limón, ralladura de 4 limones, 5 huevos L, 40 g de maizena y 280 g de azúcar. Tritura la leche de coco con el zumo de limón y la maizena y reserva. Mezcla los huevos y el azúcar hasta que blanqueen, agrega la ralladura de limón y mezcla. Pon la mezcla de leche de coco con el zumo de limón y la maizena en un cazo al fuego y cuando comience a estar templado, incorpora la mezcla de huevos, azúcar y ralladura, bate bien con la ayuda de unas varillas hasta que espese. Rellena los vasitos, deja enfriar y mete a la nevera para servir bien frío.
Como te habrás dado cuenta, estas recetas de comida fría no son sólo perfectas para disfrutar en vacaciones, sino que son un viaje en sí mismo a través de la gastronomía de nuestro país. Si te han gustado, echa un vistazo a estas otras recetas para preparar con niños, ¡te encantarán!