Ahorrar es uno de los propósitos de año nuevo más habituales. Y, también, uno de los que solemos abandonar antes de tiempo. La falta de motivación y de disciplina tienen buena parte de la culpa. Sin embargo, este año puedes lograrlo. ¿Cómo? Con el reto de las 52 semanas, un método muy popular en Estados Unidos con el que, a final de año, tendrás 1.378 euros ahorrados.
¿Imaginas poder hacer el viaje de tus sueños aun con problemas para llegar a fin de mes? Si pones en práctica el reto de las 52 semanas, te aseguramos que lo tienes mucho más fácil. Esta idea para ahorrar es tan buena como sencilla y, además, esconde una potente enseñanza. Veamos en qué se basa.
El reto de las 52 semanas
Este método consiste en ir ahorrando durante las 52 semanas que tiene el año. La semana uno, ahorramos un euro; la semana dos, dos euros; la semana tres, tres euros y, así, hasta la semana 52. Si sumas todo lo que tienes que ahorrar, verás que terminarás el año con un superávit de 1.378 euros. Tan fácil como lees.
Llegados a este punto es probable que te estés preguntando cómo vas a conseguir las últimas semanas ahorrar la cantidad correspondiente. Pues bien, tienes tiempo suficiente para organizarte e intentar conseguir ese dinero a largo plazo para no abandonar el reto. No te conformes con el euro de las primeras semanas y sé previsor. Si vas teniendo un remanente, lograrlo será pan comido.
¿Qué aprendemos del reto de las 52 semanas?
Lo interesante de esta metodología es la adquisición de buenos hábitos en relación al ahorro y su efecto acumulativo. Motiva ir viendo cómo, semana a semana, van creciendo nuestros ahorros. Además, si por cualquier motivo te vieras obligado a abandonarlo en la semana 35, tendrías ya ahorrados 630 euros.
Uno de los trucos para que este reto sea todo un éxito es empezarlo con tu pareja, bien haciéndolo por separado o juntos. En el primero de los casos, cuando flaquea la fuerza de voluntad, viene bien contar con el apoyo de alguien. De todas formas, también puedes hacerlo con un familiar o con un amigo. ¡Juntos, siempre es mejor!
Si te has animado y vas a poner en práctica esta metodología, para hacerlo, puedes ir metiendo el dinero en una hucha, programar transferencias a tu cuenta de ahorro y, si no tienes una, creártela. Es importante que separes el dinero que vas ahorrando de los gastos comunes y los recibos para que seas consciente de lo que tú mismo estás siendo capaz de hacer.
Todo esfuerzo tiene su recompensa
Imagina que te aficionas a esta técnica de ahorro y la llevas a cabo año tras año. Disponer de una cuenta de ahorro no sólo te permitirá ahorrar, sino también te reportará beneficios. Unas ganancias que podrás ir reinvirtiendo para a medio-largo plazo contar con una cantidad más que interesante. Pásate por cualquier oficina de tu Caja Rural de confianza para que te asesoren sobre los distintos productos financieros de ahorro y, si no eres cliente, puedes conseguir ser parte de la familia de Caja Rural en unos minutos sólo con tu móvil.
Solo tienes que descargarte la app ruralvía móvil, pulsar el botón ‘Hazte Cliente’ y seguir los pasos que te irá marcando el proceso.
- Elegir la entidad de Caja Rural de la que te quieras hacer cliente.
- Completar la información que te solicitemos a través de un formulario.
- Será importante que tengas el DNI a mano para poder enviarlo en el momento.
- Recibirás una videollamada para confirmar tu identidad.
- Finalizarás el proceso firmando los documentos de manera online.
En unos minutos serás cliente de la entidad que hayas elegido. Si tienes algún problema durante el proceso o prefieres que te ayude una persona directamente, puedes llamar al teléfono gratuito 913 346 780 de lunes a viernes, desde las 09:00 hasta las 21:00 horas, o los sábados hasta las 15:00 horas.
Ahorrar no es fácil, pero como te hemos demostrado, tampoco es imposible.