El ciclo comprar-tirar-comprar al que nos empuja la obsolescencia programada está llegando a su fin. No sólo porque es una efectiva forma de ahorrar, sino por la necesidad de preservar un medio ambiente, que pide auxilio a gritos. Aunque los fabricantes se empeñen en limitar la vida útil de los productos, existen otras vías para no caer en un consumismo excesivo y mantener nuestro bolsillo a salvo.
Nuestros smartphones pueden ser una buena muestra de ello. Y, además, ejemplifican a la perfección la definición que ya en los años 50 hizo el diseñador industrial Brooks Stevens sobre la obsolescencia programada: “instalar en el comprador el deseo de poseer algo un poco más nuevo, un poco mejor, un poco antes de lo necesario”.
Según los datos de un reciente estudio, los usuarios de smartphones cambiamos nuestros terminales, de media, en 2 años y 9 meses. Y eso que “cada vez tardamos más”, reza el estudio. Es decir, cada ese tiempo, pasamos por caja y nos gastamos alrededor de 800 euros, si no más, que es lo que cuestan hoy en día este tipo de dispositivos. Aunque, según los expertos, la vida útil de los smartphones podría llegar a ser de entre ocho y diez años de media.
Consejos para alargar la vida de tu smartphone
Renovar el teléfono móvil no sólo porque empiece a funcionar mal, que puede repararse, sino por nuestras ganas de querer tener el último modelo no nos ayuda a ahorrar, y es una actitud medioambientalmente irresponsable. Por ello, si no quieres caer en esta tendencia, te vamos a dar una serie de consejos para alargar la vida de tu smartphone.
- No cargues la memoria. ¿Eres de los que tiene el teléfono lleno de fotos y no borra ninguna? ¡Mal! Una memoria llena y saturada ralentiza el dispositivo y hace que no funcione como debería. Procura dejar libre siempre libre un 25 por ciento de la capacidad de la memoria.
- Vigila la temperatura. Evita que el calor se apodere de tu teléfono y tenga una subida de temperatura. En dispositivos iPhone, cuando éste está expuesto mucho tiempo al calor y se calienta más de la cuenta, te avisa. Otros dispositivos no lo hacen y el deterioro es el mismo: un jaque mate a la batería y al resto de componentes internos.
- Haz un uso eficiente de la batería. El deterioro en la batería suele ser uno de los principales fallos de los smartphones. La mayoría de ellas la llevan integrada, por lo que si no es posible cambiarla, podemos vernos obligados a tener que renovar el teléfono. Por ello, es importante hacer un uso eficiente de la misma. En el caso de que, por ejemplo, se haya descargado por completo, se recomienda no utilizar el móvil durante los 10 primeros minutos de carga.
- Apágalo de vez en cuando. ¿Hace cuánto tiempo que no apagas tu teléfono? No apagarlo nunca acorta su vida útil. En este sentido, los expertos aconsejan reiniciarlo o apagarlo, al menos, una vez por semana.
Además de poner en práctica estos sencillos consejos, asegurar nuestros smartphones es otra eficaz forma de ahorrar. Aunque pueda parecer un gasto extra, puede ser una inversión porque evitaremos hacer un gran desembolso en caso de que se estropee y tengamos que repararlo o, en el peor de los casos, cambiarlo por uno nuevo.