Según un reciente estudio, los españoles somos los ciudadanos europeos más comprometidos con el cambio climático. Esto quiere decir que en nuestro país somos conscientes de que el clima está sufriendo una alteración sin precedentes y que es necesario implantar medidas colectivas contra el cambio climático para solucionarlo.
Crisis climática: la previsión de la ciencia
A pesar de que los científicos de todo el mundo llevan décadas advirtiendo sobre las consecuencias negativas asociadas al uso de combustibles fósiles, el cambio climático en España no se había puesto en el centro del debate hasta ahora.
Al igual que sucedió en otros países, la llegada de la pandemia priorizó que la crisis climática y sus consecuencias ganarán protagonismo en la conversación social.
Informe de las Naciones Unidas sobre el cambio climático
A raíz del último informe elaborado por los científicos de las Naciones Unidas, España al igual que el resto de la Unión Europea se ha concienciado aún más respecto a las medidas contra el cambio climático.
Según los últimos datos hallados por los científicos, si no cambiamos el ritmo de producción y consumo actual, el planeta experimentará una subida de 1,5 ºC antes de 2050.
Acuerdo del Clima de París 2015
Esta nueva realidad no sólo cambia las previsiones más optimistas desarrolladas por la ciencia hasta la fecha, sino que apremia a los países de todo el mundo a ser más estrictos en el cumplimiento de los objetivos alcanzados en el Acuerdo del Clima de París de 2015. El informe del IPCC es claro: si no actuamos contra el cambio climático durante esta década, la temperatura global de la Tierra podría incrementarse por encima de los 2ºC antes del año 2050.
Aumento de la temperatura global de la tierra
Esto supone todo un cambio de paradigma porque los científicos desconocen cuáles pueden ser las consecuencias climáticas de que la temperatura global suba 3 o 4 grados. Un aumento en torno a los 2ºC traería consigo un aumento del nivel del mar, mayor número de olas de calor, incendios, huracanes e inundaciones.
Sin embargo, más allá de suponer que este aumento de la temperatura nos llevaría a un escenario de crisis climática muy preocupante, los científicos no son capaces de describir las consecuencias más adversas de forma tangible.
Medidas de España contra el cambio climático
Para atajar el avance del cambio climático en España y en el resto del mundo es importante la conciencia individual, pero también la colectiva. Es decir, es básico que los ciudadanos sepan que su comportamiento es clave para alcanzar los objetivos, pero es indispensable que los Estados legislen para que las empresas también cumplan este cometido.
En relación con esta idea, el último estudio elaborado por Open Society Foundations, avala el compromiso de los españoles para luchar contra el cambio climático en España. Para hacernos una idea:
- 81% de los encuestados considera que el cambio climático es “una gran amenaza”
- 71% coincide con la comunidad científica en que el ser humano es responsable de la crisis climática.
Si comparamos los resultados de esta última pregunta con otros países europeos encuestados nos encontramos la siguiente fotografía respecto al pensamiento de que el hombre es el responsable de la crisis climática:
- 62% de los italianos
- 58% de los alemanes
- 52% de los británicos.
En resumen, aunque más de la mitad de los encuestados de todos los países del continente europeo consideran que el cambio climático es consecuencia del ser humano, en España, un amplio 71% coincide con el criterio científico.
Nuevos hábitos en España para frenar el cambio climático
En relación con los objetivos incluidos en la Agenda 2020-2030, los ciudadanos españoles están comprometidos a cambiar sus hábitos con tal de frenar el cambio climático en España. Según los datos desprendidos de la encuesta, los españoles ya compramos menos plásticos y estamos dispuestos a coger menos el coche y recurrir al tren en vez de al avión.
Desde el punto de vista colectivo, España también está comprometida con el cambio climático. La Unión Europea ha diseñado una hoja de ruta para todos los países de la UE donde todos se comprometen a desarrollar medidas para lograr la neutralidad energética en el año 2050.
Es decir, si dentro de 29 años Europa quiere ser un territorio cero emisiones y reducir las mismas un 45% de cara al 2030, es importante que países como España desarrollen medidas concretas contra el cambio climático. Así, nuestro país aprobó hace varios meses atrás la Ley Cambio Climático y Transición Energética, un conjunto de normas que buscan alcanzar metas concretas de cara al año 2030 y 2050.
Ley Cambio Climático y Transición Energética
Uno de los primeros adelantos que incluye esta ley busca precisamente cumplir con los objetivos impuestos desde Europa de cara al año 2030. Para lograrlo algunas de las medidas de España contra el cambio climático son las siguientes:
- Reducir las emisiones de gases efecto invernadero en un 23%, tomando como referencia las emisiones del año 1990.
- Obtener una penetración del 42% de energía renovable en el consumo de energía final.
- Lograr construir un sistema eléctrico donde un 74% de la electricidad se genere a partir de energías de origen renovable.
Igualmente, y además de la Ley del Cambio Climático y Transición Energética, en 2023, la reducción de los plásticos de un solo uso será drástica: ningún comercio de alimentación podrá vender fruta o verdura envasada en este material.
En línea con los compromisos individuales y colectivos descritos anteriormente y relacionado con las medidas de España contra el Cambio Climático, desde las entidades del Grupo Caja Rural trabajamos día tras día por apoyar proyectos cada vez más sostenibles y que tengan en cuenta el bienestar del planeta en el corto y medio plazo.