Si hay algo que todos recordamos de nuestra infancia es, sin lugar a duda, aquellos veranos en el pueblo donde nos sentíamos libres, disfrutando de la naturaleza junto a nuestros amigos y familia. Ahora, son nuestros hijos los que van a vivir esas historias que recordarán toda su vida. Por ello, no se nos ocurre una idea mejor que llenar este verano de experiencias inolvidables que se puedan recordar para siempre.
12 actividades para un verano en familia
A continuación, te proponemos 12 actividades que puedes hacer con tus hijos al aire libre este verano para ayudarles a potenciar su desarrollo físico y mental mientras se divierten. Coge papel y boli, ¡y toma nota!
- Darse un chapuzón en ríos, playas o piscinas: el calor aprieta, ¡y qué mejor forma de refrescarse que un buen baño de agua fría!
- Recoger basura en una playa cercana: cuidar del medioambiente es un valor esencial que debemos inculcar a los más pequeños. Este tipo de actividades les ayudan a tomar conciencia de la importancia de proteger la naturaleza.
- Hacer paddle surf: hacer deporte, refrescarse y divertirse a la vez es posible gracias a deportes acuáticos como éste.
- Dar un paseo en bici por el casco histórico de tu ciudad: además de practicar deporte, es una oportunidad perfecta para pasear por estos lugares tranquilamente, sin el estrés del día a día.
- Llevarles a la sección infantil de un museo cercano: la cultura les permite abrir su mente y empatizar con otros puntos de vista. ¡Aprenderán mientras se divierten!
- Organizar un taller de lectura en casa: el verano brinda una oportunidad única para devorar libros llenos de historias increíbles y hacer que nuestros hijos desarrollen una mayor capacidad de comprensión e imaginación.
- Preparar helados caseros: endulza esta época enseñando a los más pequeños de la casa a preparar ricos postres y helados para refrescarse.
- Preparar un picnic e ir a comer al parque: tras todo un año estudiando, las buenas temperaturas nos brindan la oportunidad perfecta para respirar aire puro y disfrutar de un rico snack al aire libre.
- Recoger flores silvestres y hacer ramos: además de relajar la mente dando un agradable paseo por el campo, podrás llenar tu casa de flores que sirvan como elemento de decoración estival.
- Visitar una granja cercana: el roce hace el cariño, por eso, qué mejor manera que inculcarle el amor por los animales que pasar una agradable jornada junto a ellos.
- Ir de acampada un fin de semana: sin duda, una oportunidad perfecta para conectar con la naturaleza y vivir unos días llenos de aventuras junto a los más pequeños.
- Ver las estrellas por la noche: no hay película veraniega que no cuente con una escena como esta. Pruébalo y vive un verano de película.
Recuerda que realizar actividades al aire libre influye positivamente en tu descanso, aumenta tus defensas y previene enfermedades óseas. Además, te brindan la oportunidad de concienciar a los más pequeños en sostenibilidad y sobre la importancia de cuidar el medioambiente.
