Según ha confirmado la propia empresa pública, el objetivo que tiene Aena es convertirse en un operador neutral en carbono para el año 2026, y conseguir un nivel de cero emisiones en 2040. Para ello, ha impulsado un Plan de Acción Climática, la hoja de ruta a nivel corporativo con la que pretenden alcanzar esta meta.
Se trata de una estrategia contemplada para la década 2021-2030, con la que Aena quiere sentar las bases necesarias que le permitan llegar a operar sin emisiones en 2040. Así, el Plan de Acción Climática define unos objetivos anuales basados en algunos requisitos regulatorios a nivel europeo y recomendaciones realizadas por diferentes expertos, también relacionadas con el plan España 2050.
¿Cuánta energía consume un aeropuerto?
Un aeropuerto es uno de los centros que más energía consume a diario, debido a que está en constante funcionamiento y a la cantidad de energía que necesita toda la maquinaria que hay. Para que te hagas una idea, el sector de la aviación es responsable del 13,9% del total de emisiones en el ámbito del transporte, según datos de la Comisión Europea.
Asimismo, el consumo anual estimado en los aeropuertos españoles ronda los 950 GWh, lo que evidencia el alto peso que tiene la electricidad en este tipo de instalaciones. De hecho, una de las últimas novedades que ha anunciado Aena es su intención de llevar a cabo el Plan Fotovoltaico, con el que los 14 aeropuertos que más horas de sol reciban tendrán plantas fotovoltaicas desde las que distribuirán energía renovable para alimentar a la red de aeropuertos nacionales.
Así funciona el suministro de energía al aeropuerto
Generalmente, los aeropuertos tienen dos sistemas eléctricos independientes: el aéreo y el terrestre. El primero suministra energía al área de operación aérea exclusivamente; es decir, a todos los aparatos y dispositivos que permiten el funcionamiento de los aviones. Hablamos de torres de control, balizas, sistemas de navegación, comunicaciones, radares, etc. Por otro lado, el sistema eléctrico terrestre es el que se utiliza para generar la energía que necesitan las terminales de pasajeros. Es decir, iluminación, climatización, sistemas de pesaje, etc.
En estos sistemas energéticos, no puede haber fallos, puesto que un error podría provocar un daño, en muchos casos, irreparable. Por ello, los sistemas eléctricos se alimentan, primordialmente, de la red de la compañía eléctrica. Además, disponen de unos grupos electrógenos que se activan en caso de fallo de la red principal, para garantizar el suministro de energía. Por último, estas fuentes suelen duplicarse, una medida de prevención en caso de doble fallo.
Contaminación que produce el transporte aéreo
Tal y como apuntábamos, el transporte aéreo emite casi un 14% del total de emisiones del sector. Pero, además, la Agencia Europea del Medio Ambiente especifica que las emisiones de gases de efecto invernadero en el continente europeo se han multiplicado por más del doble en las últimas tres décadas.
Este incremento se debe, en parte, al aumento de pasajeros que se ha registrado desde los años noventa. No obstante, esta tendencia seguirá siendo ascendente, de manera que ya hay estudios que aseguran que el transporte aéreo causa alrededor del 3,5% de las actividades que aceleran el cambio climático. Tanto es así que, si no se revierte la situación, en el año 2050 podrían triplicarse las emisiones de la aviación internacional.
Ciudades de España con aeropuerto
En España hay un total de 48 aeropuertos repartidos por toda la geografía española. Así, las ciudades que cuentan con aeropuerto son las siguientes:
- A Coruña
- Santiago de Compostela
- Vigo
- Asturias
- Santander
- Bilbao
- Vitoria
- San Sebastián
- Logroño
- Pamplona
- Zaragoza
- Huesca
- Girona
- Barcelona
- Reus
- Sabadell
- Palma de Mallorca
- Marratxí
- Ibiza
- Menorca
- Valencia
- Alicante
- Albacete
- Madrid
- Burgos
- Valladolid
- León
- Salamanca
- Badajoz
- Sevilla
- Jerez de la Frontera
- Algeciras
- Córdoba
- Jaén
- Málaga
- Almería
- Murcia
- Tenerife
- Fuerteventura
- Las Palmas de Gran Canaria
- El Hierro
- Lanzarote
- La Palma
- La Gomera
- Ceuta
- Melilla
Plan de Acción Climática para reducir las emisiones de los aeropuertos
A corto plazo, Aena pretende reducir el consumo eléctrico por pasajero en un 10% para 2030, basándose en la hoja de ruta que ha elaborado y que contempla tres grandes ejes con diferentes líneas de acción:
Neutralidad en carbono
Este es el objetivo principal para llegar a ser un operador cero emisiones en 2040, y para ello se seguirán las siguientes líneas de acción:
- Energías renovables
- Eficiencia energética
- Compensación de emisiones
- Flota propia sostenible
Aviación sostenible
Engloba un conjunto de acciones centradas en reducir las emisiones propiamente de los dispositivos de aviación, actuando como eje vertebrador de todos ellos:
- Eficiencia en operaciones aeronáuticas
- Propulsión limpia
- Flota ‘ground handling’ sostenible
Comunidad y cadena de valor sostenible
Colaboración transversal con otros agentes (proveedores, clientes, colaboradores, etc.) para llevar a cabo acciones sostenibles e ir alineados en este objetivo común. En este caso, las líneas de acción se dividen en:
- Movilidad sostenible
- Cooperación y concienciación climática
¿Es posible que los aeropuertos consuman energía solar?
Una de las alternativas más eficientes desde el punto de vista del ahorro energético es apostar por energías renovables, siendo la solar una de las más utilizadas a nivel mundial. Sin embargo, ¿hasta qué punto es esto posible en los aeropuertos?
La compañía pública puso en marcha su plan fotovoltaico en 2019, mediante el cual se estimaba el objetivo de alcanzar un 70% de autosuficiencia energética a partir de energía solar. Para ello, ha comenzado a construir grandes plantas fotovoltaicas en aquellos aeropuertos que cuentan con más horas de sol y que tienen una extensión suficiente como para ello.
No obstante, la instalación de plantas fotovoltaicas capaces de surtir a esos niveles de energía solar a un aeropuerto tiene un elevado coste, lo que aumenta su complejidad y escalabilidad a los aeropuertos más pequeños. Para subsanar esta carencia, la compañía prevé generar suficiente energía como para nutrir a toda su red de aeropuertos.
¿Es posible? Sí, aunque no a corto, sino a largo plazo. ¿Es costoso? También, lo que hace que sea difícil trasladarlo a otros sectores en los que el nivel de emisiones es también muy elevado. No obstante, toda acción que se lleve a cabo en pro de la eficiencia energética es más que bienvenida.
Sin duda, esta es una filosofía compartida por todas las entidades que formamos parte de Grupo Caja Rural, que cuenta con un plan de sostenibilidad corporativo que, entre otros aspectos, contempla el reto de ejecutar acciones que contribuyan al cuidado del medioambiente.