¿Qué está pasando con la renta fija?

En este comienzo de 2023 la renta fija ha copado los titulares de los principales medios financieros. La falta de comprensión en el funcionamiento de este mercado, sumado a varios años sin ofrecer prácticamente rentabilidad, lo había mantenido a la sombra de la renta variable. A raíz de la importante caída en precio ocurrida en 2022 y, el aumento en  la rentabilidad ofrecida, el interés sobre este activo ha vuelto a resurgir. Por ello, conozcámoslo...
Actualidad3 febrero, 202324388 min

En este comienzo de 2023 la renta fija ha copado los titulares de los principales medios financieros. La falta de comprensión en el funcionamiento de este mercado, sumado a varios años sin ofrecer prácticamente rentabilidad, lo había mantenido a la sombra de la renta variable. A raíz de la importante caída en precio ocurrida en 2022 y, el aumento en  la rentabilidad ofrecida, el interés sobre este activo ha vuelto a resurgir. Por ello, conozcámoslo en mayor profundidad y veamos que ha provocado todo este revuelo.

 

Cómo funciona la renta fija

Antes de entrar en materia, es importante comprender el funcionamiento de la renta fija y, conocer cómo funcionan los elementos que la componen. La rentabilidad de un activo de renta fija, también conocida como tasa de interés TIR, es el porcentaje que se retribuye por el dinero prestado. Cuando un cliente compra una emisión de renta fija, por ejemplo, un bono, está comprando una deuda por la cual va a ser recompensado a través de pagos de intereses en forma de cupón y la amortización del nominal a vencimiento.

Cuando el interés del mercado aumenta, el precio del activo de renta fija disminuye, ya que los inversores buscan maximizar su rentabilidad y lo consideran menos atractivo respecto a un nuevo activo con mayor rentabilidad. Así, la relación entre la rentabilidad y el precio de un activo de renta fija, es inversa; Cuando la TIR sube, el precio baja, y viceversa.

 

Qué ha ocurrido en 2022

Una vez comprendido el funcionamiento, analicemos lo ocurrido en 2022 tomando como referencia un bono emitido por el gobierno español a 10 años. El 31 de diciembre de 2021, el estado español pagaba un interés del 0,595% a los compradores de sus bonos a 10 años. En esa misma fecha, a cierre de 2022, esa TIR ascendía al 3,531%. Teniendo en cuenta la relación descrita entre el precio y la TIR de un activo de renta fija, podemos entender por qué, frente a esta importante subida en las rentabilidades ofrecidas por el emisor, el precio del activo tomó precisamente el camino contrario.

Los bancos centrales fueron los principales causantes de este repunte en la rentabilidad mediante las subidas de tipos de interés que realizaron en su lucha contra la inflación. A día de hoy, ya han realizado buena parte del trabajo y, pese a que se evidencien nuevas subidas en los tipos, no se esperan grandes sorpresas. El mercado parece ya capaz de predecir con una mayor certeza cuales pueden ser los nuevos movimientos tanto de la FED como el BCE, ayudando a la estabilidad del mercado de renta fija.

Es importante destacar que, aunque la subida de tipos sea la principal variable de influencia en el precio y rentabilidad de estos activos, existen también diferentes cuestiones a tomar en cuenta. El riesgo de impago, las circunstancias económicas generales, las perspectivas macroeconómicas y una larga lista de variantes también pueden llegar a influir en el mismo.

 

Perspectivas para 2023

Este nuevo escenario, nos ha llevado a tener un mercado de renta fija que vuelve a ofrecer rentabilidades atractivas (las rentabilidades venían de estar en negativo o cercanas a cero). En estas circunstancias, además de estas mayores rentabilidades, el riesgo sobre los propios activos parece reducido si elegimos activos de corto plazo y con emisores con buen rating o incluso deuda pública de países de la zona euro. Por todo esto, la probabilidad de caídas en precio por nuevos aumentos bruscos de los tipos de interés parece limitada, y nos parece un activo a tener en cartera este año.

Desde Gescooperativo hemos sido activos en este entorno tan cambiante. Hemos logrado que por ejemplo, fondos de inversión de plazos muy cortos como el Rural Renta Fija 1 o Rural Deuda soberana ofrezcan una TIR media a vencimiento a precios de mercado de sus activos de en torno al 3% y el 2,6% respectivamente (a fecha de publicación). Si quieres tratar de sacar partido a un entorno en el que la renta fija ha vuelto a ser capaz de ofrecer rentabilidades interesantes, te animamos a que acudas a tu caja rural más cercana para obtener asesoramiento personalizado. De esta forma, podrás elegir la solución que mejor se adapte a tu perfil inversor y a tus necesidades.