Basuraleza. Ésta es la palabra elegida por Libera, un proyecto puesto en marcha por la ONG ambiental SEO/BirdLife, en colaboración con Ecoembes, para definir los residuos generados por el ser humano y abandonados en la naturaleza. Alterando el equilibrio de los ecosistemas, afectando a la biodiversidad y contaminando ríos, mares y océanos.
El objetivo está claro: eliminar la basuraleza de los espacios naturales. Y. para ello. se ha impulsado la iniciativa ‘1m2 por la naturaleza’. Una gran recogida colaborativa, que tendrá lugar mañana, 15 de junio, en distintos puntos de nuestro país. A Coruña, Zaragoza, Burgos, Santa Cruz de Tenerife, Valladolid, Badajoz, Ourense, Murcia, Huelva, Cáceres, Almería, Albacete, Córdoba, Málaga, León… Son sólo algunas de las ciudades que se han sumado a esta convocatoria, que espera batir récords, tanto de participación como de cantidad de basura recogida.
En 2018, la segunda edición de ‘1m2 por la naturaleza’, reunió a más de 11.000 personas y se recogieron 80 toneladas de basura. La recogida estará organizada por colectivos constituidos y, si quieres participar, todavía puedes acceder a la página web proyectolibera.org, buscar tu ciudad e inscribirte. Sin embargo, este proyecto va mucho más allá de fechas marcadas en el calendario.
En el caso de que no puedas participar mañana en ninguna de estas recogidas, siempre puedes colaborar con la iniciativa durante tu vida diaria, en cualquiera de tus excursiones o salidas habituales a la naturaleza, recoge la basura y los residuos que encuentres a tu paso. Además, puedes difundirlo a través de redes sociales para ayudar a dinamizar la lucha social contra la basuraleza.
El impacto de la basuraleza
La gran cantidad de escombros y residuos que hay en la naturaleza ha degradado el hábitat natural de muchas especies. Las cifras son alarmantes. Según Libera, en 2016 se tenía conocimiento de 800 especies afectadas, “aunque para entonces ya se empezaban a conocer estimaciones por encima de las 1.400 especies marinas y acuáticas asociadas con la basuraleza”. Un reciente informe calcula que el 90 por ciento de las aves marinas han ingerido plástico y que, de seguir así, el número llegará al 99 por ciento en 2050.
Y es que, de los casi seis billones de residuos que se producen anualmente, 4,5 billones acaban formando parte de la basuraleza. De ahí, la necesidad de impulsar iniciativas como ‘1m2 por la naturaleza’.
“La basuraleza está lejos de ser un problema meramente estético o secundario. Aunque queda mucho camino por recorrer en el ámbito científico, la evidencia es incontestable: estamos ante una catástrofe ambiental que requiere de acción de todas y todos. Todo es ciudadanía, sectores productivos y administraciones en todos los niveles, desde el local al internacional. La basuraleza no es sólo la escombrera ilegal o la isla de plástico del Pacífico. Es cada colilla, cada papel de aluminio para el bocata o cada envoltorio que se abandona en la naturaleza. Ese acto puede tener efectos directos, por ejemplo en la degradación o destrucción de hábitat, e indirectos, ya que la presencia dispersa de basuraleza en casi cualquier ambiente puede convertirse en una fuente de contaminación difusa, a menudo invisible, pero de consecuencias impredecibles a gran escala”, explica el responsable del área Social de SEO/BirdLife, Federico García.
Libera, unidos contra la basuraleza
El objetivo del proyecto Libera es concienciar y movilizar a la ciudadanía en pro de unos espacios naturales libres de basura. Para ello, más allá de las batidas colaborativas, plantean un abordaje integral del problema, centrándose en tres áreas de actuación: conocimiento, prevención y participación.
- Conocimiento. Saber más sobre la cantidad, composición, origen, comportamiento y áreas de acumulación es básico para identificar soluciones eficaces para su prevención. Por ello, desde Libera colaboran junto a ONG’s y universidades en el desarrollo de metodologías y herramientas innovadoras, como la ciencia ciudadana, para incrementar el conocimiento en los diferentes ecosistemas terrestres, marinos y fluviales.
- Prevención. A través de la prevención, desde Libera trabajan para cambiar hábitos, informar y educar en el cuidado y el respeto de la naturaleza. A través de materiales educativos y formativos, trasladan a la ciudadanía la necesidad de trabajar juntos para frenar la basuraleza.
- Participación. Una de las claves para frenar la basuraleza es concienciar a la ciudadanía desde la participación, tal y como sostienen desde Libera. Es en este área en el que se enmarca ‘1m2 por la naturaleza’, “una iniciativa que demuestra que salir un día al entorno natural todos juntos para recoger residuos (es decir, la suma de todos nuestros metros cuadrados limpios) tiene un impacto muy positivo en nuestro entorno, ayudando a cambiar nuestra perspectiva sobre este problema”, apuntan.
Desde el Grupo Caja Rural, a través de las entidades financieras, tratamos de participar activamente en el cuidado de la Naturaleza, e impulsamos actividades y hábitos de protección del medio ambiente.